Un estudio sobre la composición y la procesabilidad de diferentes materias primas de biomasa ha encontrado que las cáscaras de semillas de girasol y el aserrín de madera de álamo son las más adecuadas para producir productos de base biológica mediante la conversión rápida de pirólisis.
El estudio fue realizado por Capax Biobased Development y BTG Biomass Technology Group como parte del proyecto Horizon 2020 Bio4Products, que está estudiando la viabilidad de un nuevo concepto de biorrefinería basado en pirólisis rápida.
Efecto sobre productos de pirólisis y fracciones.
Para analizar el efecto sobre la calidad y el rendimiento del bio-aceite de pirólisis rápida, el producto principal de la pirólisis rápida, BTG Biomass Technology Group procesó cada una de las materias primas en su planta de los Países Bajos. El mayor rendimiento se obtuvo del aserrín de madera blanda, mientras que el peor resultado se obtuvo de la paja de trigo.
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Finalmente, se extrajeron los bio-aceites obtenidos de las diferentes materias primas para obtener lignina y fracciones de azúcar. En general, no se encontraron grandes diferencias durante las extracciones. Sobre la base de estos resultados y otros criterios que incluyen la facilidad de manejo y la sostenibilidad, se realizó una clasificación, donde la cáscara de semillas de girasol y el aserrín de madera de álamo sobresalieron del resto.
Nuevos productos de base biológica.
La lignina y las fracciones de azúcar son productos químicos intermedios renovables que están siendo utilizados por algunos socios del proyecto Bio4Products para sustituir materiales fósiles como los fenoles y la creosota.
Hexion está utilizando la lignina pirolítica para reemplazar el fenol fósil en compuestos de moldeo y espumas aislantes. TransFurans Chemicals está probando cómo se puede aplicar la fracción de azúcar en resinas a base de furano, y está trabajando con Foreco para desarrollar una formulación para la modificación de la madera.
Los socios están reportando resultados positivos, y se espera que los nuevos productos de origen biológico puedan llegar al mercado poco después del cierre del proyecto en 2020.